20151123

Leonardo Da Vinci y la historieta

Data estel·lar vitruviana Dilluns 20151123

Nos ponen sobre la pista de la evolución de la narrativa gráfica dos párrafos del libro de Charles Nicholl, Leonardo da Vinci, El Vuelo de la Mente, traducción de Carmen Criado y Borja García Bercero. 2006. Círculo de Lectores según edición cedida por Santillana Ediciones Generales s.l. Título original: Leonardo: The Flights of the Mind. Edición original: 2004. 

Es uno de esos ejemplos que adoro porque ponen los pelos como escarpias a las mentes bienpensantes que claman por un origen de la historieta basado en el Yellow Kid.

Son los que, aunque se remonten a la Columna de Trajano ¿para cuándo el integral? tiemblan de miedo no vaya a ser que los jeroglíficos hubieran sido tebeos y no textos escritos pero con dibujos... sí, pero es que resulta que también hay dibujos y no sólo texto. 

p176-177. Estamos en el episodio Indepedencia (con perdón) 1477-1482: se habla de unos poemas satíricos basados o copiados de Antonio Cammelli il Pistoia o il Pistolese o Antonio da Pistoia, conocidos como "le facezie, il sale e il miele" traducido como "bromas, sal y miel"; "facècies" existe en catalán y son anécdotas o chistecillos; en castellano también existe y aquí y en otros párrafos es donde yo pregunto que para qué hay dos, no uno sino dos traductores. Empobrecer el idioma no es agradable. Los que lo tenemos que hacer por obligación, en fin... bastante castigo tenemos, pero el que compra o piratea y lee un libro qué menos que proveerle de algún palabro ajeno a su inmediatez para que se pesque un diccionario., 

Leonardo Da Vinci escribe notas sueltas y dibujos por doquier, en restos de páginas, en hojas distraídas de una catedral donde trabajaba. El papel era escaso y difícil, y no era cuestión de desperdiciarlo. No existía la industrialización, no había un sistema inmenso de tiendas y cadenas de tiendas que vendieran material de papelería. 

Entre esos escritos, el biógrafo destaca un poema que dice:
Pandite iam portas, miseri, et subucite pontes
Nam Federigus adest quem Gebellina sequor...

Es traducido de esa especie de latín así: 

Abrid ahora las puertas, miserables, y bajad los puentes
Aquí está Federico, a quien yo, la Ghibellina, sigo...

La Ghibellina es una pieza de artillería gigante que consigue rendir el 14791114 a Colle Val d'Elsa ante las tropas papales. ¿Cuántos acorazados tiene el Papa?, preguntó un jefazo soviético... Pues hasta el siglo XIX sí tenía, sí.  

"Federico" es Federico de Montefeltro, duque de Urbino, uno de los generales de la liga antiflorentina [Leonardo da Vinci pastaba en la Florencia de los banqueros Médici]. En la misma página aparecen varios dibujos de piezas de artillería: el poema y los dibujos van juntos, son inseparables.

Eran poemas satíricos con dibujos para ser mostrados y texto e imagen son inseparables. Forman un conjunto: llamémosle historietas, tebeos, chistes gráficos. 


El libro está bien pero adolece de falta de ilustraciones en casos clave como el aquí comentado.

Paso a la página 238: como no os creéis que Leonardo de Vinci se sacara de la manga historietas, no os creeréis que buscase una máquina de vapor: 

Luego viene un críptico memorándum que termina así: "Preguntar al Maestro Lodovicho por las cañerías de agua, el horno pequeño, el yesquero, el movimiento perpetuo [¿una máquina?], los fuelles pequeños y los fuelles de fragua".

Le falta decir: "chuf-chuf". El mayor problema de Leonardo Da Vinci y de otros inventores, ingenieros, etc. es la fuente de energía. También los aparatos de precisión para cortar, etc: el caso de la calculadora de ¿Leibniz, Pascal, ambos? que sólo se pudo fabricar en condiciones cuando la tecnología de corte y milimetraje lo permitió, pero también cuando ya se podían hacer máquinas mejores. Algún prototipo, vale, pero varias, era difícil. Luego está la cuestión de la mentalidad: como está mal visto romper cabezas, no hay nada que hacer y no se puede avanzar.

Para sus ideas de máquinas voladoras, el peso de los materiales era importante: con una fuente de energía mecánica, el piloto hubiera podido haber volado de verdad. Como no sabemos si hubo pruebas, consideraremos que sí que las hubo y que funcionaron parcialmente. Llevo una vida oyendo lo contrario y no me ha servido de nada.

Sobre el movimiento perpetuo, una vez estudiado, considera que es imposible (ver página 239). Se adelanta tres siglos al resto de investigadores europeos. Del siglo XV al siglo XVIII. "Ilusión o fruto de la superstición, junto con los quiméricos intentos de fabricar oro de los alquimistas". Por tanto, Da Vinci tampoco cree en la piedra filosofal que convierte un mineral en oro. No hay más explicación en el libro. Se ha dado por supuesto que las mentes científicas han odiado la alquimia, el tarot y las paraciencias. Luego te topas con personajes de todo pelaje cuando escarbas fuera de la biografía oficial, sucinta e ideológicamente escogida de cualquier enciclopedia o libro del personal de a pie.

Veo en el movimiento perpetuo visto por Leonardo Da Vinci un intento de conseguir un motor que funcione sin matarse a pedalear, a mover los brazos, a tener mulas girando molinetas...

En la página 238-239 aún leemos: 

Debajo vemos tres líneas de jeroglíficos de aspecto vagamente hebraico. 

Leonardo de Vinci inventa cientos de jeroglíificos de pasatiempos: letras convertidas en dibujos o dibujos que simbolizan palabras. Lo que hemos encontrado en tantas revistas. 

Ya, ya... que eso no son tebeos. Pero es que las líneas de contacto son tantas, y las fronteras tan difíciles de dilucidar. Es un lenguaje muy amplio. Metáforas visuales convertidas y reutilizadas: es lo que hace Leonardo Da Vinci, según el biógrafo Charles Nicholl, para animar reuniones sociales y fiestas.

En página 239: 

Los escritos de Leonardo fueron encuadernados un tanto desordenadamente, aparte de que el contenido de cada hoja es desordenado. Son notas sueltas, apuntes, ideas que se le ocurrían, borradores. Ignoro si hubo "pases a limpio" de sus ideas pero no parecen haber llegado. El Códice Trivulziano (que perteneció a la familia Trivulziano de Milán en el siglo XVIII): 

Muestra, como su contemporáneo, el MS B [otra recopilación de escritos de Leonardo], el interés del artista por la arquitectura, y contiene caricaturas ingeniosas, algunas de las cuales se cuentan entre las primeras figuras grotescas que llegaron a convertirse en un fascinante subgénero de dibujos leonardescos. 

Recapitulemos: 

  1. Caricaturas con figuras grotescas.
  2. Poemas, por tanto, texto, acompañado de dibujos unidos. No se pueden leer por separado: no tienen sentido completo cada uno por su cuenta. Con intención de ser presentados, leídos, explicados ante un público amplio que es el equivalente de la época de la comunicación en masas (en una épocas sin masas y con impresión incipiente y sin libertad de prensa).
  3.  Jeroglíficos: letras, palabras, dibujos, metáforas visuales. Ídem: juegos visuales y semánticos escritos preparados para ser presentados de forma pública como una forma de ocio.

Llámenle como quieran: Leonardo Da Vinci es dibujante e historietista incipiente.

Esperamos su integral.